¿Qué aceites esenciales utilizar para el deporte?

La práctica deportiva requiere preparaciones, ya sea ocasional o intensiva, y que el practicante sea un profesional o un simple entusiasta. También es necesario considerar la recuperación muscular para prevenir lesiones y potenciar las capacidades físicas.

Para llevar a cabo estas etapas cruciales, muchos deportistas utilizan aceites esenciales. Estas soluciones representan una ayuda natural, fácil de usar y efectiva. Más información está disponible en este artículo.

Cómo utilizar aceites esenciales para prevenir y aliviar las contracturas y calambres

Al retomar el deporte, los calambres y las contracturas son comunes. Las agujetas también son frecuentes. Para prevenirlas, es necesario usar una sinergia de aceite esencial de romero alcanforado y aceite esencial de lavandín abrial. Estos aceites relajan los músculos a través de diferentes mecanismos, proporcionando un efecto analgésico reforzado. Cada aceite tiene sus propias virtudes y misiones. Mientras que el lavandín abrial relaja las tensiones, el romero disuelve los cristales de ácidos lácticos y úrico formados. Previenen los calambres y aseguran una recuperación menos dolorosa. Para optimizar los resultados, es necesario mezclar los dos aceites esenciales con un aceite vegetal como el de coco o el de almendra dulce. La aplicación se realiza mediante un masaje profundo después del esfuerzo. También es posible usar un inhalador para aspirar el producto y hacerlo actuar desde el interior.

Aceites esenciales para aliviar los músculos después del ejercicio

Para mantenerse en forma incluso después de un esfuerzo físico, se puede usar aceite esencial de clavo. Esta planta tiene propiedades rubefacientes, al igual que el aceite esencial de gaulteria. Los deportistas pueden usar ambos aceites en dosis iguales. Optimizan la circulación sanguínea y tienen un efecto calefactor inmediato. También permiten flexibilizar la zona masajeada y oxigenar al máximo los músculos. Utilizados en masaje y, a menudo, con un inhalador para una inhalación natural (húmeda o seca), estos dos aceites esenciales aseguran un buen rendimiento muscular.

Aceites esenciales para dinamizar el organismo

Retomar el deporte requiere una buena motivación y mucho dinamismo. No se debe perder entusiasmo para realizar actividades físicas nuevamente. Para ello, es importante preservar los recursos energéticos, lo que permite evitar cansarse rápidamente y sentir demasiada fatiga, que es fuente de dolor. Un cóctel energizante natural es indispensable para potenciar la motivación. El aceite esencial de limón es una de las soluciones más efectivas para recuperar el ánimo y enfrentar diferentes pruebas. Se puede combinar con aceite esencial de menta piperita. La mezcla se puede aplicar antes o durante la práctica. Gracias al efecto tonificante de estos aceites esenciales en inhalación o masaje, el deportista se mantiene despierto y dinámico.

Aceites esenciales para aliviar las molestias y dolores

Los dolores causados por esfuerzos físicos, caídas, golpes o agujetas a menudo impiden que los antiguos practicantes retomen sus actividades deportivas. Afortunadamente, algunos aceites esenciales, como el de menta piperita, tienen un efecto analgésico que calma estos dolores. El frío intenso actúa de inmediato en la zona dolorida y su efecto refrigerante reduce la sensación de quemazón y malestar. Para atenuar los hematomas, se puede hacer una mezcla con aceite esencial de helicriso italiano. Esta planta, también conocida como siempreviva, tiene propiedades analgésicas y cicatrizantes, actuando sobre la microcirculación. Además del uso de un inhalador, los aceites son perfectos para la aplicación local.

Aceites esenciales para el confort articular y tendinoso

Además de los dolores musculares, los tendones y las articulaciones también pueden sufrir molestias al retomar el deporte. Para calmarlas, se necesita el aceite esencial de eucalipto limón. Tiene la capacidad de optimizar simultáneamente el confort de los tendones y articulaciones. También se puede mezclar con gaulteria para hacer una inhalación o usar la mezcla para masajear la zona dolorida. Sin embargo, siempre es necesario priorizar el calentamiento antes de la práctica y los periodos de descanso en caso de dolor.

Aceites esenciales para desinfectar y cuidar la piel

La sudoración es algo normal durante la práctica deportiva. Sin embargo, algunas personas sudan demasiado, lo que puede causar micosis u otros problemas en la piel. Para ellos es necesario utilizar soluciones que les permitan desinfectar su cuerpo. Los aceites esenciales de árbol de té y lavanda abrial ayudan a reducir el exceso de calor que provoca la formación de micosis u otros problemas cutáneos. También se puede usar aceite esencial de ciprés, que limita la sudoración y actúa de manera preventiva. A diferencia de otros aceites esenciales que pueden tener efectos incluso al usar un inhalador, estos aceites para la desinfección deben aplicarse únicamente en las zonas afectadas.

Información adicional y recomendaciones

Como cualquier uso, los aceites esenciales deben ser bien dosificados. Son concentrados de principios activos y un exceso puede causar problemas, como alergias. También es necesario informarse bien sobre las virtudes y propiedades de cada producto para obtener los resultados deseados. En la mayoría de los casos, los aceites esenciales deben diluirse en otras soluciones, como aceites vegetales o macerados. Esto facilita su aplicación y optimiza sus efectos en las zonas objetivo.

Es posible utilizar productos de parafarmacia que contengan aceites esenciales para beneficiarse de sus virtudes. En el mercado, existen bálsamos, cremas o lociones especialmente destinadas a personas que practican deporte. En cuanto a la aplicación, hay varias opciones. La inhalación es una de ellas. El masaje es el método más común, ya que permite alcanzar más rápida y fácilmente las zonas objetivo.

En cualquier caso, siempre se debe consultar a profesionales de la aromaterapia, medicina natural o medicina convencional antes de usar aceites esenciales. Esto permite conocer las variedades a utilizar, la cantidad necesaria y la frecuencia de uso según la condición a tratar.