Ya sea en la vida personal, profesional o en el deporte, el éxito solo puede llegar con una buena mentalidad. Para alcanzar sus objetivos deportivos, una persona no solo debe entrenar de manera regular, sino también perfeccionar su técnica, tener una dieta adecuada y adoptar la actitud correcta. Aquí es donde entra en juego la mentalidad de crecimiento o Growth Mindset. Este concepto fue desarrollado por Carol Dweck, profesora de psicología social en la Universidad de Stanford, y se aborda en su libro «Osez réussir ! : Changez d’état d’esprit». Se encuentra respaldado por varios estudios que demuestran que adoptar la mentalidad adecuada es crucial para el éxito. Entonces, ¿cómo podemos desarrollar nuestra mente y alcanzar nuestras metas deportivas?
Mentalidad fija y mentalidad de crecimiento: logrando metas deportivas
Según Carol Dweck, existen dos tipos de mentalidades: la fija y la de crecimiento. Cada persona posee ambas y estas evolucionan a lo largo de la vida. Dependiendo del contexto (trabajo, deporte o educación), una persona fluctúa entre estos dos extremos. Afortunadamente, existen ejercicios para estimular la mentalidad adecuada. Exploraremos estas diferencias más adelante, pero primero veamos las características de cada mentalidad.
Características de una mentalidad fija
Una persona con una mentalidad fija puede pensar:
- que su cuerpo no está hecho para el deporte;
- que es demasiado pesada, delgada, pequeña o débil;
- y compararse con otros creyendo que nunca será tan en forma o rápida como ellos.
Además, puede:
- creer que el talento y la inteligencia son innatos e inmutables;
- ver el esfuerzo de manera negativa;
- evitar desafíos;
- desanimarse con los fracasos;
- rechazar las críticas;
- y ver el éxito ajeno como competencia.
Ventajas de una mentalidad de crecimiento
En cambio, adoptar una mentalidad de crecimiento puede hacer las cosas más fáciles. Una persona con este enfoque cree en el desarrollo de su talento a través del esfuerzo, no duda en enfrentar nuevos retos y ve la crítica como una oportunidad de aprendizaje. El éxito de los demás le inspira y sus logros lo motivan. Estudios muestran que una mentalidad de crecimiento mejora la autoestima y la autoeficacia, que es la capacidad de enfrentar situaciones difíciles.
Transformar la mentalidad para lograr objetivos deportivos
Aunque las características de una mentalidad fija puedan parecer familiares, no hay razón para alarmarse. Al entrenar la mente, una persona puede reenfocar su percepción hacia una mentalidad más constructiva. Aquí algunos consejos para fortalecer la mente y alcanzar los objetivos deportivos.
- Redefinir el éxito: El camino es más importante que el destino. En el deporte, el éxito no significa necesariamente participar en un maratón o levantar grandes pesos. Lo crucial es esforzarse y continuar progresando. Celebra cada logro, por pequeño que sea, como un paso hacia tu objetivo.
- Aceptar los fracasos: Entrenar regularmente no siempre garantiza el éxito inmediato. Todos enfrentamos contratiempos; son parte del proceso de aprendizaje. Lo importante es seguir motivado y aprender de cada experiencia.
- Tomar riesgos y ser innovador: Sal de tu zona de confort. Intenta nuevos desafíos, ya sea que siempre quisieras levantar pesas o correr con tus amigos. Sé más fuerte que tus excusas.
- Aceptar críticas e inspirarse: No te intimides por el éxito de los demás. Usa sus logros como inspiración y busca consejos. La crítica constructiva es una herramienta valiosa para mejorar.
Desarrollar una mentalidad de crecimiento puede ser el impulso que necesitas para alcanzar tus metas deportivas.
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