Descongelar un alimento, como el pollo, puede parecer sencillo, pero cada persona tiene su propio método: dejándolo en la encimera, utilizándolo en el horno o colocándolo en el refrigerador. Sin embargo, ¿cuál de estas técnicas es la correcta y cómo evitamos riesgos potenciales? El reconocido medio médico WebMD ha elaborado un informe sobre este tema. A continuación, presentamos sus hallazgos.
Errores comunes al descongelar alimentos
Primero, analicemos qué prácticas debemos evitar, ya que son más frecuentes de lo que creemos.
Dejar alimentos a temperatura ambiente
Al sacar un paquete de pechugas de pollo del congelador y colocarle sobre la mesa, no se garantiza que estén listas para cocinar al regresar. Los alimentos perecederos, como la carne y los huevos, deben descongelarse en condiciones seguras. Si permanecen a temperatura ambiente por más de 2 horas, entran en la zona de peligro donde las bacterias proliferan rápidamente.
Confiar en que el centro permanece congelado
No te dejes engañar por el frío del centro de tu alimento congelado. Las partes exteriores suelen descongelarse antes que el interior, lo que significa que pueden estar en la zona de riesgo para las bacterias aunque el centro aún esté congelado.
Usar agua caliente para descongelar
La rapidez no siempre asegura la seguridad. Mientras que el agua caliente descongela rápidamente, también puede elevar la temperatura de los alimentos a niveles donde las bacterias comienzan a multiplicarse. Además, la carne puede empezar a cocinarse prematuramente.
Métodos seguros para descongelar alimentos
Descongelar en el refrigerador
Este método, aunque más lento, es el más seguro. Asegúrate de que tu refrigerador esté a 4 grados Celsius. Ten en cuenta que un paquete de pechugas de pollo puede tardar todo el día, mientras que un pavo congelado puede necesitar 24 horas. Coloca los alimentos en la parte inferior para evitar que líquidos contaminen otros productos.
Usar agua fría
Esta técnica es más rápida que la del refrigerador, pero requiere un poco más de atención. Llena el fregadero con agua fría y sumerge el alimento en una bolsa hermética. Cambia el agua cada 30 minutos y asegúrate de cocinar el alimento inmediatamente después.
Descongelar en el microondas
El microondas es útil para descongelar, aunque no siempre lo hace de manera uniforme. Si decides usarlo, retira el empaque y coloca el alimento en un recipiente apto. Recuerda cocinarlo de inmediato, incluso si planeas volver a congelarlo.
Cocinar sin descongelar
Una gran noticia es que no siempre es necesario descongelar los alimentos. Esto permite que ciertas carnes se cocinen más rápido y de manera uniforme. Por ejemplo, una pechuga de pollo congelada puede tardar unos 15 minutos más que una descongelada. Del mismo modo, no es necesario descongelar verduras congeladas; simplemente cocínalas directamente.
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