Las jornadas frías han regresado, y al caer la noche, muchas personas buscan una forma de calentarse. Una de las opciones más populares es preparar una buena sopa. Este plato no solo es reconfortante, sino que también puede ser muy saludable si se eligen los ingredientes adecuados. Al integrar alimentos ricos en fibra y antioxidantes, se puede mantener una alimentación balanceada, limitando al mismo tiempo las grasas saturadas. Pero, ¿cuáles son las sopas más recomendadas para aquellos con diabetes? Aquí te presentamos cinco opciones sugeridas por expertos en nutrición.
Sopa de Lentejas
«La sopa de lentejas es una opción excepcional para los diabéticos, ya que es rica en fibra y proteínas vegetales, además de ser baja en grasas saturadas«, comenta Vandana Sheth, experta en nutrición de Los Ángeles, en un artículo para Eating Well. «Una porción de lentejas cocidas ofrece 18 gramos de proteínas y 16 gramos de fibra, lo que ayuda a equilibrar los niveles de azúcar en sangre«.
Sopa Minestrone
Considerada «un plato lleno de nutrientes, ya que contiene fibras, vegetales y proteínas vegetales«, la sopa Minestrone es altamente recomendada por la dietista Jessica DeGore, especialista en diabetes. Esta sopa no solo es nutritiva, sino que también favorece la regulación de la glucosa. Para enriquecerla aún más, se puede optar por utilizar pasta integral en lugar de la pasta tradicional.
Sopa de Verduras
Un puré de verduras puede resultar en una deliciosa sopa llena de fibra y antioxidantes, esenciales para el control del nivel de azúcar en sangre. La versatilidad de esta sopa es impresionante, ya que puedes combinar las verduras que más te gusten, creando así múltiples variantes ricas en vitaminas, especialmente A y C.
Sopa de Pollo
La sopa de pollo es el símbolo del confort. Además, se trata de un plato nutritivo que fortalece el sistema inmunológico y es sencillo de preparar. Según la dietista Gina Jones, utilizar los huesos del pollo para hacer un caldo puede incrementar su contenido en proteínas, vitaminas y minerales. “Las proteínas en el caldo ayudan a generar una sensación de saciedad. Añadir vegetales como zanahorias, espinacas o apio proporciona los nutrientes y la fibra necesarios para regular la glucosa en sangre”, concluye.
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